El libro analiza el enfrentamiento entre las clases dirigentes del Antiguo Régimen y la nueva burguesía durante el siglo XIX, centrándose en Aragón entre 1808 y 1850. A través de artículos cronológicos, muchos inéditos o difíciles de localizar, se aborda desde la Guerra de la Independencia hasta la consolidación de la revolución liberal.
Los primeros artículos exploran aspectos de la Guerra de la Independencia, como la xenofobia antifrancesa y los esfuerzos organizativos para la defensa de Zaragoza. Se describen batallas, motines, deserciones y el caos de la guerra, subrayando la diferencia entre los relatos bélicos y la realidad vivida.
Tras la invasión napoleónica, se estudia la resistencia al régimen señorial y la lucha por la propiedad de la tierra, con ejemplos locales y colaboraciones que muestran la presión del campesinado y las nuevas dinámicas políticas. La creación de la Milicia Nacional por la burguesía y la exclusión de jornaleros ilustran la complejidad social y política del periodo.
La disolución del Antiguo Régimen, los conflictos entre burguesía, clero y clases populares, y la evolución hacia el republicanismo se analizan a través de estudios de caso y fuentes documentales, siempre dando nombre y protagonismo a los actores implicados.
El bloque final incluye apuntes biográficos sobre figuras como Isidoro de Antillón, Braulio Foz, Juan Bruil, el Marqués de Lazán, José Mor de Fuentes y José de Palafox, ofreciendo perspectivas personales y detalles inéditos sobre sus vidas y contribuciones.





